23 de agosto de 2016

Venimos simplemente a trabajar

Una canción que a mediados los 70 grabó La Bullonera. La letra (de Javier Maestre) tiene "sus cosas". Aquí una versión moderna, con Franco Deterioro, Alejandro Montserrat y Nacho Vera.



No hemos venido aquí para deciros
que está dura la vida aquí debajo,
para eso está el jornal, la ley y el palo;
por eso la miseria, el herido, el condenado.
Tampoco repartiremos ninguna golosina
que oculte al paladar el gusto amargo,
para eso están las promesas y aguinaldos;
por eso la mentira, el sueldo bajo.

Venimos simplemente a trabajar,
como uno más a arrimar el hombro al tajo:
ésta nuestra herramienta, nuestras voces;
ésta nuestra canción, nuestro trabajo.

Venimos a cantar para los nuestros,
como un deber primero y solidario;
es por eso que a veces no nos dejan
ni siquiera subir al escenario.
No esperamos, pues, que nadie salga
con más convencimiento del que trajo,
aquí no descubrimos nada nuevo
que no esté sucediendo a vuestro lado.

Venimos simplemente a trabajar,
como uno más a arrimar el hombro al tajo:
ésta nuestra herramienta, nuestras voces;
ésta nuestra canción, nuestro trabajo.

Queremos cantar al campesino,
al obrero industrial y al estudiante,
a los hombres y mujeres de esta tierra,
todos juntos dando un paso hacia delante.
Venimos a hablar, pues, sobre la vida,
desde un lugar familiar para nosotros,
que es el mismo lugar que en todas partes
le reserva al oprimido el poderoso.

Venimos simplemente a trabajar,
como uno más a arrimar el hombro al tajo:
ésta nuestra herramienta, nuestras voces;
ésta nuestra canción, nuestro trabajo.

Aquí la canción original de La Bullonera


11 de agosto de 2016

Notas al montaje 'Aquí tenéis Blas de Otero'

El mes pasado subimos varias entradas en torno a Blas de Otero y nuestro espectáculo a él dedicado. Aquí traemos algunos de sus textos y varias curiosidades técnicas del montaje. 
En escena: Luis Felipe y Dolos, con la colaboración especial de Ernesto C. Fuera de escena, Manolo y Rafa.



En proscenio, a la derecha del espectador, una mesa de trabajo: papeles, agua, libros y una máquina de escribir que el actor teclea mientras entra el público. En el otro lateral, un violoncello.
Cuando el actor se dirige al público en tono coloquial, se ve, proyectado sobre el telón de fondo, el título del texto que se recita. Así con cada nuevo poema. El primero, "Atestado", se juega  a modo de presentación  surrealista.





Mutación de escena con un sonido de campana sobre el oscuro total.
Lenta, entra candileja de luz concentrada y foco con efecto giratorio (nubes rajadas).  Sobre el telón de fondo, los títulos.




A LA INMENSA MAYORÍA  

Aquí tenéis, en canto y alma, al hombre 
aquel que amó, vivió, murió por dentro 
y un buen día bajó a la calle: entonces 
comprendió: y rompió todos su versos.



Así es, así fue. Salió una noche 
echando espuma por los ojos, ebrio 
de amor, huyendo sin saber adónde: 
a donde el aire no apestase a muerto.



Tiendas de paz, brizados pabellones, 
eran sus brazos, como llama al viento; 
olas de sangre contra el pecho, enormes 
olas de odio, ved, por todo el cuerpo.



¡Aquí! ¡Llegad! ¡Ay! Ángeles atroces 
en vuelo horizontal cruzan el cielo; 
horribles peces de metal recorren 
las espaldas del mar, de puerto a puerto.



Yo doy todos mis versos por un hombre 
en paz. Aquí tenéis, en carne y hueso, 
mi última voluntad.  Bilbao, a once 
de abril, cincuenta y uno. 



(Pido la paz y la palabra)

El actor se arrodilla y recibe la luz concentrada en su cara. Atmósfera de oratorio. Poemas breves separados por campanas: "En el principio", "Tañer", "Me llamarán...", "En la inmensa mayoría" y

PIDO LA PAZ Y LA PALABRA 

Pido la paz y la palabra
Escribo 
en defensa del reino 
del hombre y su justicia. Pido 
la paz 
y la palabra. He dicho 
«silencio», 
«sombra», 
«vacío» 
etcétera. 
Digo 
«del hombre y su justicia», 
«océano pacífico», 
lo que me dejan. 
Pido 
la paz y la palabra.
(Pido la paz y la palabra)

Cambia la escena. Luz general. El actor se vincula a un atril con textos, el violonchelo va acompañando algunos pasajes. Poemas: "Biotz-Begietan", "Muy Lejos", "Euskera egin dezagun", "Recuerdo que en Bilbao", "Morir en Bilbao".




             BIOTZ-BEGIETAN (Fragmento)


(...)Madre, no me mandes más a coger miedo


y frío ante un pupitre con estampas.
Te enciendes la verdad como una lagrima,
dame la mano, guárdame
en tu armario de luna y de manteles.

Esto es Madrid, me han dicho unas mujeres
arrodilladas en sus delantales,
este es el sitio
donde enterraron un gran ramo verde
y donde está mi sangre reclinada.

Días de hambre, escándalos de hambre,
misteriosas sandalias
aliándose a las sombras del romero
y el laurel asesino. Escribo y callo. (...)
(Pido la paz y la palabra)



Pausadamente se dispara una batería de poemas breves. Ángel Guinda los llamaría "poemas bala". Alguno parece -siquiera formalmente- inspirado en los machadianos "De mi cartera". Históricamente, pueden verse como puente entre estos y los futuros "Artefactos" de Nicanor Parra. Véase en ellos lo que se quiera; yo vislumbro aires de posmodernidad. Aquí, algunos:

15 DE ABRIL 
La primavera ha venido,
y se ha ido.
 (En castellano)
OROS SON TRIUNFOS
Ojo!
Estados Unidos sale
de espadas.
Para defender el oro.
 (En castellano) 
…PARA VOLAR MUY ALTO  
Entra en ti mismo.
(Récord de altura: la ascensión de Cristo.)
Bate la marca:
¡Desciende a lo más hondo de tu alma!
(Ancia)
De los poemas compuestos en colaboración con la poesía popular ( Blas tomaba la cita de Augusto Ferrán: "he puesto unos cuantos cantares del pueblo, para estar seguro al menos de que hay algo bueno en este libro" ) y su música, hay ejemplos como este:

 NO SALGAS, PALOMA AL CAMPO  
Sé muchas cosas y otras que me callo.
Cómo decir España, patria,
libre.
España
libre. (Violentas
carcajadas.)

Anda
jaleo, jaleo.
No dejan ver lo que escribo,
porque escribo lo que veo.

Sé que Castilla
es ancha.
Cómo decir azul, ayer,
morada.
Ayer.
Mañana.

Anda, ¡aleo,
jaleo.
... lo que veo con los ojos
de la juventud y el pueblo.
(En castellano)
"Palabras reunidas para Antonio Machado" viene a ser el ecuador de la obra. Fuera de libros, en la Obra Completa aparecen poemas dispersos por revistas; aquí uno dedicado a su rapsoda principal:

 ALELLUIA

Pío…
(El pájaro está herido.)

Fernández…
(El pájaro echa sangre.)

Cueto
(El pájaro se ha muerto.)

Pío Fernández Cueto:
¡Oh pájaro resurrecto!

Oh! Cuando el actor recita "Campo de amor" un niño camina hacia el escenario, sube y se planta ante él cuando dice los últimos versos (...acaso un niño está mirándome el pecho de cristal),  entonces el niño gira hacia el público y dice: "Escribo hablando". Al fondo, el título reza "Arte poética".  Vase (que en los guiones teatrales así se escribe "se va" de escena).
De los muchos momentos en que Blas cita a sus referentes preferidos, tomamos este:

PALABRA PERMANENTE 

La palabra desnuda de mi tierra.
El Romancero y el Cancionero anónimo.
El verbo escueto de fray Luis.
Quevedo. Rosalía. Machado.
Esto es todo. Y, tras el mar, Vallejo.
Y, tras las rejas, Nâzim Hikmet.
Tú, juventud. Palabra permanente.
(Hojas de Madrid con La galerna)

Con Beethoven: "León de noche" y "Cartilla poética".
Ahora, el actor detiene el recital, habla del poeta y sus años en Barcelona. Recita "En el nombre de hoy", de Jaime Gil de Biedma.


Acabado el paréntesis, vuelve el actor al centro de escena y siguen poemas como "Sili Sili...", que es una suerte de nana, y:
Y LÁGRIMAS EN LOS OJOS

Ando buscando entre estas calles
los verdes años que perdí,
calle arribita, calle abajo,
calle Mayor, Embajadores,
a la plazuela Antón Martín,
las modistillas que sonríen
con la frescura del jazmín,
una morena y una rubia,
hijas del pueblo de Madrid.

Los años treinta, la República,
su alegría casi infantil,
la plaza vieja con casetas
rosas, azules, carmesí,
los organillos verbeneros
y los mantones de Maní
y entre sus calles sandungueras
lo mejorcito que yo vi,
una morena y una rubia,
hijas del pueblo de Madrid.

Vino la guerra con sus manos
llenas de pelos y un fusil
entre los dientes, incendiando
Cuatro Caminos, Chamberí,
matando niños, desterrando
la libertad, todo lo bello,
maravilloso, alegre, y
una morena y una rubia,
hijas del pueblo de Madrid.
(Hojas de Madrid con La galerna)


La siguiente escena se compone  de una docena de sonetos, reflejo de los temas recurrentes del poeta. Entre uno y otro, una cortina musical. 
Ahora se ve la utilidad de unos trípodes de hierro que ocupan el centro del escenario. Son cinco torrecillas de luz con sus focos muy picados, cenitales o contras, según se sitúe el actor, pues unos van hacia delante y otros hacia atrás. Entre ellos deambula el actor, como en una calle mal iluminada.
"Plañid así" hace de puente entre los sonetos y el poema final:

Aquí tenéis mi voz
alzada contra el cielo de los dioses absurdos,
mi voz apedreando las puertas de la muerte
con cantos que son duras verdades como puños.

Él ha muerto hace tiempo, antes de ayer. Ya hiede.
Aquí tenéis mi voz zarpando hacia el futuro.
Adelantando el paso a través de las ruinas,
hermosa como un viaje alrededor del mundo.

Mucho he sufrido: en este tiempo, todos
hemos sufrido mucho.
Yo levanto una copa de alegría en las manos,
en pie contra el crepúsculo.

Borradlo. Labraremos la paz, la paz, la paz,
a fuerza de caricias, a puñetazos puros.
Aquí os dejo mi voz escrita en castellano.
España, no te olvides que hemos sufrido juntos.
(En castellano)

Hasta aquí, las fotografías pertenecen al estreno en el Teatro de la Estación. Otra versión, reducida, fue en la Iglesia de Veruela. De esta segunda función son las fotos siguientes.




10 de agosto de 2016

Guilermo Anderson. Honduras.

Poco sabemos de Honduras. Las asonadas de cada tanto y poco más.
Guillermo Anderson (1962-2016) ha sido uno de sus  más valiosos puentes al mundo.
En sus comienzos escénicos estuvo vinculado al mundo teatral; puso música a versos de varios poetas. Actuó por todo el mundo; en España estuvo varias veces; su popularidad en Honduras fue, es, muy grande. Murió el pasado sábado.

http://www.guillermoanderson.com/

Conocí su música durante una estancia en San Pedro Sula, donde estuve apartado del mundo para escribir unos guiones que llevaba entre manos en el año de 1994. En realidad, no fue su música lo que me acercó al cantor, sino la figura del caudillo  Francisco Morazán. Un amigo me hizo saber que Ánderson había compuesto una cantata sobre las ideas y batallas del general, liberal y republicano, Morazán (1792-1842). Me dio una cinta (no sé si se llegó a editar comercialmente), que hoy sigo escuchando.

Ese mortal llamado Morazán es una obra dividida en dos partes: "2000 hombres" y "Esos marineros".  Eje medular, las guitarras; con tambores, marimba y sutil sintetizador.  En una transición, se escucha algún tipo de cuencos y  de birimbao. Anderson hace las voces de los personajes (Morazán, narrador, enemigos, amigos), así como los coros y voces envolventes.
La letra, no sé si era suya, se impregna de la épica que la inspira:

(...)
Estos marineros lo han nombrado capitán
de esa nave que se llama Centroamérica
hoy va a andar el rumbo que le toca navegar
sobre la ignorancia  y las olas coléricas.
(...)
Alzar las velas de la Constitución,
la libertad de prensa y de religión.
(...)
Para Centroamérica es todo su amor y su vida
sigamos el rumbo para verla unida.

Me extraña que tras su muerte, la semana pasada, no aparezca en ninguna reseña su vinculación al morazanismo. Alguna razón habrá, más allá de que sus éxitos musicales no tuvieran relación con lo que comúnmente llamamos "canción política". Nunca es fácil saber cómo evolucionan en otros países las sensibilidades históricas, políticas... También pasa a veces que el artista busca enfriar antiguos compromisos que no facilitan el encuentro con públicos más amplios. Esto no quiere decir que Anderson estuviera "al margen". Su repertorio presenta canciones que hablan de la emigración, del medio ambiente, de los derechos de los pueblos... canciones críticas pero con fondo vital, que anima la autoestima de las gentes. Era solidario por naturaleza. Muchas campañas (salud, infancia, ecología...) contaron con su presencia y sus obras.

Las aportaciones de Anderson (así, sin acento en la "A") a la música centroamericana incluyen expresiones autóctonas tomadas de culturas como la garífuna y la miskita.

Lamentamos la muerte del colega. Mandamos abrazo a los amigos hondureños,

En las redes se puede escuchar sus canciones. Aquí una entrevista reciente al hombre:



1 de agosto de 2016

Luz Rueda

Luz Rueda era poeta.

Nacida en Valladolid, estudió Veterinaria en Madrid y, a finales de los 70, ejerció en Zaragoza.


Hacia 1981,  se afincó en Pueblo Nuevo del Guadiana. Trabajó con vacas. Entró de funcionaria en la Junta de Extremadura. Experta en parasitosis, trabajó con cerdos.

Durante años escribió columnas de opinión (Hoy, Periódico de Extremadura). 

El diario Hoy publicó en 1997 su famoso artículo 'Agricultura regional y funcionarios', que firmaba como jefa de sección de la Consejería de Agricultura, origen de un conflicto político-administrativo que duró ocho años. En ese periodo comenzó a publicar sus versos.

A veces los poemas se acompañaban con pinturas de su compañero, Ramón de Arcos.  Su casa en la vega del Guadiana la diseñó como homenaje a sus padres, hermanos e hijos. Cuidaba de los perros y de los caballos. Científica y sentimental, tenía un pronto gruñón.

Amiga de esta casa desde 1979, año en que nos ayudó con la producción de Jorge Manrique. Era apasionada del arte, de todas las artes; tuvo su círculo zaragozano y sus amigos artistas: Pilar Tena, Goyo Maestro, Gregorio Villarig…
Carmen Orte y yo la secundamos en algunas aventuras culturales, familiares y públicas. 
Un verano participó en Sal a Remolinos y recitó sus versos en el barranco de Remolinos. Gustaron; rezumaban amor.

Familia y amigos penaremos su ausencia.

Un día escribió en la red:
Siendo escéptica
creo q creo en las mareas.
Y en la luna

Luz, poeta.


Luisfelipe